La autora de la celebrada Arte inició su carrera como narradora con este texto, una agridulce e inolvidable colección de viñetas autobiográficas sobre el amor, la desdicha y el paso del tiempo, ese gran destructor. En sus páginas aparecen personajes de su entorno magistralmente perfilados: sus hijos, su mejor amiga, su agen
te literaria o su padre, con quien manitiene una conflictiva relación.