Thomas Guillaume, de Fontenoy, entra casualmente en un ambulatorio y por unaconfusión asume una identidad que no es la suya, la de sobrino del general De Fontenoy. Con esta nueva vida, participa en un convoy de la Cruz Roja que busca heridos en el frente de batalla, el cual es organizado por madame de Bormes, quien no tolera verse «excluida del único espectáculo que entonces importaba [la guerra].